Experiencia profesional
Soy militar. Mis Reales Ordenanzas dicen:
“Cuando el militar actúe en misiones para contribuir al mantenimiento de la paz, estabilidad y apoyar la ayuda humanitaria, lo hará como instrumento de la Nación española al servicio de dichos fines, en estrecha colaboración con ejércitos de países aliados y en el marco de organizaciones internacionales de las que España forme parte”. (Art. 93)
Además,
“Dará primacía a los principios éticos que responden a una exigencia de la que hará forma de vida” (Art. 15)
En una alocución reciente, el Rey pidió a las Fuerzas Armadas el cultivo de valores como "la cultura, la inteligencia, los derechos de las personas, la tolerancia y la solidaridad".
La Operación de la Unión Europea EUFOR/Atalanta, es la ocasión que me permitirá aplicar, día a día, ésas y muchas otras ideas desarrolladas en nuestras Ordenanzas que constituyen nuestro código de conducta.
Me gusta mi colectivo, sus tradiciones, costumbres, actitudes y por lo general, su comportamiento. Me siento orgulloso de ser militar español.
Experiencia humana
Voy a tener la posibilidad de permanecer en África durante una temporada, en una zona con pobreza extrema, donde escasean el agua y los alimentos. Una zona del globo que ha sido asolada por guerras y donde el ser humano es víctima de las circunstancias que le han tocado vivir.
Espero tener la posibilidad de conocer a la población, verles la cara, sentir sus problemas. Quiero ser capaz de constatar la hipocresía de Occidente, conocer de primera mano la injusticia social que se produce entre Norte y Sur.
Consideraciones socio-políticas de carácter personal
Mi axioma de partida es que la pobreza material de tantos seres humanos es, en buena medida, consecuencia de la pobreza espiritual de los más prósperos. Para mí, no existe excusa ni justificación para no atender los requerimientos de millones de seres humanos en el África de hoy.
Me pregunto qué responderíamos a un extraterrestre que llegara preguntando “¿quién manda aquí”?, ¿cómo se consiente tanta desigualdad?.
Mi respuesta sería más o menos la siguiente:
La voluntad popular recae en el poder político. Los políticos han abdicado de las ideologías (por las que habían obtenido en muchos casos su condición de gobernante o de representante del pueblo) y han abrazado las leyes del mercado. Los ejércitos de los estados democráticos estamos a las órdenes de ese poder político, que a su vez está muy condicionado, cuando no sometido, a los poderes económicos.
La escasez de escrúpulos del Mercado, (del que soy partidario, pero del que reconozco sus grandes lagunas especialmete en materia de solidaridad), hace que sus intereses sean a menudo criminales: opresión de los desheredados, pasividad ante la ausencia de derechos humanos, fabricación y comercio de armas. Desgraciadamente, para el Mercado son necesarias las guerras que aseguren el negocio de las armas y por último el negocio de las armas conlleva la existencia de terrorismo, actos criminales y guerras.
Y ahí aparecemos nosotros, los componentes de las Fuerzas Armadas, con nuestro intachable código de conducta que realza la solidaridad y la acción humanitaria en un escenario testigo exepcional del reparto extremadamente desigual de la riqueza. ¿?
Y el extraterrestre, ¡claro está! … alucinará
Durante años deseábamos, al final de la Guerra Fría, un mundo inspirado en los valores comunes para un destino igualmente común. El resultado está a la vista: la fractura social se agranda.
¡Occidente debe tanto a África!
Alguien escribió alguna vez: "Fueron vendidos al peso. Debemos pagar la deuda".
-
todo esto es muy interesante, no me refiero unicamente a tu último post, sino a todos los demas... si éste va a ser un blog en el que se comenten aspectos de todo tipo en cuanto a la vida politica-militar.. yo quiero formar parte de el.
ResponderEliminarTe vamos a echar mucho de menos, pero si la labor que alli vas a realizar merece la pena..
no importa. Siempre k sea por el bien de nuestro pais.
mis comentarios empezaran a tener mas contenido en lugar de cada palabrería cuando te establezcas en tu destino, cuestionandote siempre acerca de tu labor allí.
UN ABRAZOO